Terrores nocturnos en bebés y cómo diferenciarlos de las pesadillas
Los terrores nocturnos en bebés se caracterizan por llanto desconsolado la primera mitad de la noche, pudiendo el bebé sentarse en la cuna pero sigue dormido. No debemos despertarles ya que se calman por sí solos.
Mi bebé se despierta llorando
El sueño de los bebés va madurando según van creciendo, pasando por fases en las que descansan mejor que otras.
En particular, pueden aumentar los despertares nocturnos cuando les están saliendo los dientes, si están enfermos o pasando por fases más delicadas como la ansiedad por separación o las regresiones de sueño, afectando con ello al descanso de toda la familia.
Pero un bebé se despierta llorando también por otros posibles motivos, como son los terrores nocturnos o las pesadillas.
En función de la hora a la que suceda, de si el peque está despierto o no y de su edad podremos distinguir en los bebés pesadillas y terrores nocturnos:
Terrores nocturnos en bebés
Uno de los motivos más frecuentes que explican por qué mi bebé se despierta llorando son los terrores nocturnos, pero aunque parezca que está despierto, en realidad siguen dormidos.
Ocurre cuando de repente un bebé o niño se pone a llorar desconsoladamente, gritando, moviéndose de manera brusca y siendo imposible de calmar por mucho que lo intentes.
De golpe dejará de llorar y volverá a relajarse como si nada hubiera pasado.
Las principales características del terror nocturno del bebé :
- Ocurren en la primera mitad de la noche, aproximadamente 3 horas después de que el bebé se haya dormido, coincidiendo con una fase No REM: sueño profundo.
- Los terrores nocturnos del bebé están formados por gritos, llantos, movimientos muy bruscos, que no hay manera de calmar, llegando incluso a rechazar nuestro contacto.
- Parece que el bebé está despierto pero no es así, pudiendo llegando incluso a sentarse en la cuna aunque siga dormido.
- El bebé con terrores nocturnos tras unos minutos se calma por sí solo y vuelve a dormirse, como si nada hubiera pasado, no recordando nada a la mañana siguiente.
Qué hacer si el bebé tiene terror nocturno
Aunque nos podamos preocupar mucho porque el bebé se despierte llorando a gritos recuerda que en realidad sigue dormido, por lo que no está siendo consciente.
La manera de actuar ante un bebé con terror nocturno es no interferir: permanecer a su lado hasta que se relaje y vigilar por si se hiciera daño contra los barrotes de la cuna o cama para niño.
No tenemos que intentar despertarle ya que esto le pondría aún más nervioso, siendo más difícil que vuelva a dormirse de nuevo.
Causa de terrores nocturnos en el bebé
Estos llantos nocturnos pueden aparecer por distintos motivos, por lo que si nuestro peque es propenso a llorar en sueños deberemos valorar qué lo está causando para tomar medidas:
- Es típico de bebés sobrecansados debido a que no han descansando suficiente durante el día: pocas siestas o demasiado cortas.
- Si el niño ha tenido emociones muy fuertes ese día o ha estado nervioso.
- Si se ha acostado demasiado tarde, alargándose demasiado su última ventana de sueño.
- Si la rutina de sueño del bebé no es lo suficientemente relajante.
Si ponemos remedio a estos factores lograremos disminuir en el bebé el terror nocturno, mejorando la calidad de su descanso.
¿Cuándo empiezan los terrores nocturnos en bebés?
Se han observado casos en bebés de 7 meses, aunque son poco frecuentes, siendo más comunes los terrores nocturnos del bebé de 1 año y especialmente a partir de los 2 años.
Pesadillas en bebés
Los bebés tienen pesadillas de manera mucho más frecuente que los terrores nocturnos, siendo frecuente que se relacionen con los miedos.
Cuando sueña con algo que le asusta o le resulta desagradable, el bebé tiene pesadillas, llegando a despertarse con mucho miedo en plena noche.
Si no sabes cómo saber si mi bebé tiene pesadillas te será muy útil aprender a diferenciar las principales características de las pesadillas en :
- Suceden en la segunda mitad de la noche, llegando a despertarles.
- Recuerdan perfectamente qué estaban soñando. De hecho en peques que ya hablan suelen explicar sin problemas la pesadilla.
- A diferencia de los terrores nocturnos los peques no se calman por sí solos: están asustados y necesitan que les calmemos para relajarse y volver a dormir.
¿Por qué tienen pesadillas los bebés?
Las pesadillas en bebés pueden deberse a diferentes causas, siendo algunos peques más propensos que otros a tener pesadillas nocturnas.
Las principales causas de pesadillas en los bebés son:
- Porque están cansados, faltándoles horas de sueño y llegando agotados a la hora de dormir.
- Porque no tengan una buena rutina de sueño.
- Si están pasando por fase de cambio: llegada de un hermanito a la familia, cambio de colegio, una mudanza, divorcio... algo que pueda estar generándoles estrés.
- Cuando están enfermos, haciendo que su sueño sea más intranquilo. Esto es especialmente frecuente cuando tienen fiebre.
Bebé con pesadillas nocturnas: ¿qué hacer?
Para intentar evitar en la medida de lo posible las pesadillas en los niños debemos asegurarnos de que están descansados, durmiendo suficiente siesta durante el día y acostándoles temprano para evitar que lleguen agotados a la hora de dormir.
Un niño sobrecansado es más propenso a tener pesadillas, y parte de la culpa la tienen el abuso de pantallas. Por ello se recomienda reducir su tiempo de uso, no debiendo verse la tele ni jugar a dispositivos con pantalla como mínimo 2 horas antes de dormir.
Además, tener una buena rutina de sueño para niños siempre va a propiciar un ambiente tranquilo, así como incluir en la cena algún alimento que ayude a (3) , muy importante para que lleguen a la cama lo más relajados posible.
¿Cuándo empiezan a tener pesadillas los bebés?
Los bebés empiezan a tener pesadillas a partir de los 2 años, siendo mucho más frecuentes que los terrores nocturnos.
Sin embargo esto depende de la edad del peque, ya que si observamos pesadillas en un bebé de 1 año lo más probable es que se trate de terrores nocturnos.
Cómo diferenciar las pesadillas y terrores nocturnos en los bebés
Como debemos actuar muy diferente en una situación y en otra, en la siguiente tabla te mostramos cómo saber si tu bebé está teniendo terrores nocturnos o pesadillas, y cómo actuar en cada situación:
| Diferencia entre pesadillas y terrores nocturnos | |
|---|---|
| Pesadillas | Terrores nocturnos |
| Ocurren a partir de los 2 años | Pueden darse desde los 7 meses |
| Comunes en la segunda mitad de la noche | Se suelen dar en la primera mitad de la noche |
| El bebé se despierta por completo | El bebé sigue dormido, aunque pueda incluso sentarse en la cama |
| Necesita que les calmemos y relajemos para volver a dormirse | El peque se calma por sí solo, dejando de gritar y de moverse |
| Cuando le calmamos lo acepta, gustándole el contacto | Rechaza el contacto, moviéndose bruscamente: está dormido |
| Se acuerdan de la pesadilla, pudiendo describirla si ya saben hablar | Al día siguiente no se acuerdan de nada porque no ha llegado a despertarse |
| Debemos calmarle y darle muchos mimos para que se relaje y vuelva a dormir | No se debe despertar nunca al bebé. Solo quedarnos cerca hasta que se relaje para evitar que pueda hacerse daño con la cuna |
Preguntas frecuentes sobre los terrores nocturnos en bebés
¿Por qué mi bebé de 1 año se despierta llorando desconsoladamente?
Como solo tiene 1 año, lo más probable es que se traten de terrores nocturnos, por lo que en realidad no está despierto, sino dormido.
¿Los bebes recién nacidos tienen pesadillas?
No, los bebés recién nacidos aún no tienen ni pesadillas ni terrores nocturnos, siendo lo más característico a esa edad que se despierten por hambre o para que le cojamos, asegurándose de que estamos cerca.
¿Los bebes tienen pesadillas si ven una película de miedo?
Sí, debes tener mucho cuidado con qué ven los bebés ya que pueden causarle miedos que afecten a su descanso, o incluso control de esfínteres por la noche, siendo muy difíciles de calmar.
¿Qué hacer si mi bebé tiene pesadillas y no despierta?
Si el bebé sigue dormido no se tratan de pesadillas, sino de terrores nocturnos. No debes despertarle, solo permanecer con él hasta que se le pase por sí solo al cabo de unos minutos.
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